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Vive "slow", vivirás más y mejor

Foto del escritor: Oriol GifraOriol Gifra

Aunque el escritor y periodista canadiense Carl Honoré escribió "Elogio de la lentitud" en 2004 iniciando así lo que vendría a denominarse el "movimiento slow", lo cierto es que la sociedad actual vive más estresada y veloz que nunca.


Todo es instantáneo, tanto que ya no leemos, "escaneamos" las pantallas. Según el biólogo, genetista y neurocientífico español David Bueno, el humano moderno va perdiendo memoria porque ya no le hace falta trabajarla, ya que por un lado disponemos de la información en todo momento y en cualquier lugar, y por el otro, la información que antiguamente el hombre debía recordar estaba asociada a aspectos de supervivencia o necesidad que hoy ya no son necesarios.


Con lo que el futuro que nos depara es de una humanidad donde lo instantáneo será lo anormalmente normal.


Digo anormalmente porque en sí mismo el diseño del ser humano no se hizo para la velocidad a la cual está viviendo actualmente.





La velocidad a la que vivimos actualmente hace que literalmente no vivamos la vida, simplemente la surfeamos por encima, pero no la saboreamos con intensidad vívida.


La observación del detalle y el mimo a éste está desapareciendo a ritmo vertiginoso.


Basta con observar como conduce la gente por la carretera. Mucha gente conduce excesivamente rápido sin ser conscientes de que su vida no viene de esos minutos que llegue antes al su destino. Mientras conduce rápido, esa persona probablemente se esté perdiendo el regalo que le brinda la naturaeza de una bonita puesta de sol al atardecer, o ese sonerir que le ha regalado ese niño que pasea por la acera, o debe frenar de golpe porque ni se ha dado cuenta ni ha tenido tiempo de reaccionar para dejar pasar a un grupo de amigos que quieren cruzar el paso de peatones... no, esa persona no está disfrutando ese momento, no lo está viviendo... ese momento en su vida simplemente está pasando sin que se les vaya a quedar ni un solo segundo de recuerdo en su mente... y cómo éste, cientos de miles de minutos surfeados pero no vividos.


Carl Honoré, con el "movimiento slow" describe el ritmo acelerado de la vida moderna y defiende los beneficios de ralentizarse. Analiza cómo la obsesión por la velocidad afecta negativamente nuestra salud, relaciones, productividad y bienestar general, y propone un enfoque más equilibrado y consciente.


Muchas personas erróneamente asocian el "movimiento slow" a vivir o hacerlo todo de forma lenta, y eso es incorrecto. Este movimiento lo que propone es hacer las cosas al ritmo adecuado, ni rápido ni lento, un ritmo que permita ser conscientes de lo que estamos haciendo y prestar atención y mimo a lo que hacemos.


Él pone muchos ejemplos y en muchos ámbitos de la vida. Por ejemplo, en el trabajo o profesionalmente el hecho de trabajar al ritmo adecuado evita muchos errores y mejora la calidad del producto o servicio ofrecido, lo cual a su vez repercute en ahorro y reputación positiva para la empresa.


Lo mismo se puede aplicar cuando cocinamos algo. La gastronomía, como la música, es un arte en el cual se nota muchísimo si se hace con amor y tiempo o con prisas.


Lo peor de ésto es que estamos llegando a extremos esquiofrénicos donde no tenemos tiempo de cuidarnos, ni de cuidar a nuestros hijos o mascotas adecuadamente, es decir, no nos dedicamos tiempo ni a nosotros mismos.


Mario Ciccorossi, profesor de filosofía y es agente de atención espiritual del Hospital Sant Joan de Déu (acompaña a pacientes y familiares en los últimos momentos de la vida del paciente cuando a éste se le ha diagnosticado una enfermedad terminal) se pregunta... "¿Para qué quieres vivir tantos años? Si no tienes un porqué, vivirás en cantidad, pero no en calidad", de hecho cuando a sus pacientes les quedan pocos días de vida él siempre aconseja que "no se trata de vivir más días, sino de dar más vida a los días".


Y es imposible dar más vida a los días sin saber ni siquiere en qué día vives de lo rápido que vas por la vida.


La vida es un engranaje, como un reloj artesanal hecho de infinitas piezas hasta el más mínimo detalle. Depende de tí vivir la vida saboreándola.


Saborear la vida significa, por ejemplo, pasear por el bosque y escuchar los pájaros, oler las plantas, observar los miles de detalles a nuestro alrededor... y cómo ésto en todos los aspectos de la vida.


Disfrutar con nuestros hijos, darnos y darles tiempo, el tiempo necesario, el que estemos a gusto, sin forzar nada.


El águila surca el cielo con calma para tener tiempo de observar al detalle el territorio porque le va el comer o no comer ese día.


Está demostrado científicamente que si damos tiempo a nuestro celebro damos tiempo a la parte reflexiva para que trabaje. Cuando no nos damos tiempo, vamos con el "piloto automático" por la vida y ésta se nos escapa sin darnos cuenta.


Cuando en el título del post he escrito que "vivirás más y mejor" es porque todo lo vivirás más viviendo slow. La vida no va de tiempo, va de vivir el ahora. No sirve de nada vivir muchos años si no vives el ahora.


Eckhart Tolle escribió un bonito libro denominado "El poder del ahora" donde invita a los lectores a transformar sus vidas al cambiar su relación con el tiempo, la mente y el ego. Vivir plenamente en el presente no solo libera del sufrimiento, sino que también abre la puerta a una vida más auténtica, consciente y llena de paz.


Según él, la "presencia" es un estado de consciencia más allá de la mente. Estar presente no significa inacción, sino actuar desde la paz y la claridad del ahora.


Frena, respira profundo y observa los detalles a tu alrededor. Repite la acción siempre que veas que tu cuerpo se acelera. Date tiempo de vivir tu vida contigo mismo/a, con los seres queridos y con todo lo que te rodea.


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